Para nadie es un secreto que la vieja práctica de las redadas policiales es algo ilegal, pero que no obstante se continuan llevando a cabo. Y a través de ellas se cometen los más variados excesos y atropellos policiales.
Hace unas semanas, un vecino fue apresado en unas de estas redadas, y a los agentes del "orden" no les importo que él venía de su lugar de trabajo e incluso andaba indentificado con su carnet laboral. "Caminé pal cuartel, suba al camión", fueron las palabras que pronunciaron sus verdugos.
Recientemente, tres vecinos fueron apresados de igual manera, y tuvieron que limpiar parte del cuartel, a lo cual se suma que tuvieron que pagar el dinero que cobran los otros reos por concepto de lo que llaman limpieza.
Con las llamadas redadas, la policía busca apresar a individuos que tienen cuentas pendiente con la justicia, pero entiendo que el fin no justifica los medios, ya que en estas se actua con bastante arbitrariedad y se somete personas honestas y correctas a pasar muy malos momentos.
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